DOS FUGACES PERMANENCIAS DEL CORAZÓN
A Ibrahim Kounanbaiev Abaï
" ¿ Por qué esconder esas leyes profundas?
Nada está amurallado. "
Victor Hugo
I.
Cosa, digo tu nombre
y comienzas a vibrar,
te doy mi voz
y enseguida te vuelves música.
¡ Cosa, te acaricio con mi mirada
y, tiritando de vida,
sales de tu anonimato oscuro!
¡ Vienes de otra bruma
y me habla tu otro lenguaje,
Cosa!
¡ Oh universal escritura de la ternura!
¡ Oh amor de Dios,
único, real y efectivo
en los altos misterios del mundo!
II.
¡ Esta pequeña violeta
sobre la senda remojada
que se abre bajo mis ojos,
ignorando su propia existencia y la mía,
tocada por mi amor,
sonríe y comienza a bailar,
La alegría, riendas sueltas,
para dar el placer al aire, a la tierra,
al sol, a mi alma!
¡ Ella, tan endeble, tan graciosa
en la mano caliente de Dios
que ama su alegría
más que todo en el mundo!
¡ Oh Archipiélago de azucena de las almas intachables!
En París, 24 de febrero de 2010
Glosa:
Ibrahim Kounanbaiev Abaï (1845-1904): poeta y aksakal (sabio de edad) kazakh. Abaï nació en una familia rica y célebre de Kazajstán. Su bisabuelo Irgizbaï era juez y héroe de la tribu Tobykty, venida de Turkestán. Su abuelo Ouskenbaï y su padre Kounanbaï también gozaban de una gran influencia en el país como juez y sultán. Su madre Ouljane provenía también de una familia del distrito de Karkaraly, tenía por tíos a los humoristas mas populares en la estepa. Aprendió árabe, persa y turco, y se hizo un experto del Islam. Su carrera poética comenzó muy temprano. La pérdida en mayo de 1904 de su amado hijo , Magaouya, adelantó la muerte del poeta que se apagó cuarenta días más tarde, retirándose de la vida pública. Está considerado como el padre de la literatura kazakhe.
samedi 27 février 2010
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